Fenalco Caldas calcula que los deportistas, sus equipos y sus familias pueden representar la llegada de 24 mil personas a los hoteles del Eje Cafetero, sin contar a espectadores de las distintas disciplinas deportivas.

Foto | Freddy Arango | LA PATRIA

Fenalco Caldas calcula que los deportistas, sus equipos y sus familias pueden representar la llegada de 24 mil personas a los hoteles del Eje Cafetero, sin contar a espectadores de las distintas disciplinas deportivas.

LA PATRIA | MANIZALES

La economía del Eje Cafetero, que estuvo a la deriva en un año que el gremio comercial califica como difícil, tiene un salvavidas al alcance de su mano para este 2023: los XXII Juegos Deportivos Nacionales y VI Paranacionales.

Entre los representantes de los comerciantes y del sector turístico de Quindío, Risaralda y Caldas consultados, el alivio y el optimismo son los factores en común, pues hay una oportunidad de mercado para los bienes y servicios, con mención especial para la hotelería.

La buena hora

“En buena hora llegan los Juegos Nacionales. Ha sido un año duro y complejo por la inflación, la subida del dólar y los intereses tan altos. Esto es lo que estábamos esperando, lo celebramos”, así resume su sentir Diana Patricia López, directora de la seccional Quindío de la Federación Nacional de Comerciantes Empresarios (Fenalco), quien padeció por la caída del 50% en ventas en el departamento a lo largo del año.

Según ella, el impulso económico principal es para los hoteles ad portas del inicio de las competiciones deportivas, que traerán muchos turistas “porque detrás de cada deportista viene su familia”.

“Esperamos una recuperación económica importante”, presagia sobre una temporada de bonanza que equipara con Navidad, y que desea que jalone la economía.

Todos parten con ventaja

Aunque Josué Caballero, presidente de la junta directiva de Fenalco, seccional Risaralda, reconoce a la hotelería, la gastronomía y los centros comerciales como los sectores con más potencial de ganancias durante los Juegos Nacionales, él, al igual que Fenalco Quindío, asegura que el comercio en general se beneficiará del aumento de turistas.

“Estas actividades generan una dinámica positiva para la ciudad porque llevan a una mayor demanda. Al tener Pereira el aeropuerto principal, eso nos genera más visitantes”, argumenta.

Entre lo más destacado de la preparación de las sedes para las justas, Caballero destaca el protagonismo del sector de la construcción, que arrastraba un año negativo nacionalmente.

El mal año no ha afectado la intención de Fenalco Risaralda de alcanzar una dinamización económica. En medio de la contracción, el gremio ha aumentado sus esfuerzos para revertir la tendencia.

Impulso a hotelería e infraestructura

Entre los deportistas, sus equipos y sus familias, 24 mil personas podrían copar los hoteles en los departamentos organizadores de los Juegos Nacionales, según Juan Carlos Franco, director de Fenalco Caldas, quien señala que estas cifras son conservadoras, pues no toman en cuenta a los espectadores de las disciplinas.

De hecho, para las 2 mil 700 habitaciones y las 4 mil 686 camas hoteleras en Manizales, Franco considera que el salto económico llevará a casi el total de la ocupación debido a las competiciones.

Tal y como en Quindío y Risaralda, después de la hotelería, los restaurantes, el transporte y los centros comerciales son los estandartes que Fenalco Caldas espera que brillen gracias a la llegada de turistas en el máximo evento interdisciplinario deportivo del país.

La proyección de Cotelco Caldas, representante del gremio hotelero, es de una ocupación cercana al 90%, especialmente durante las primeras semanas del encuentro, en contraste con el resto del año.

“Lo que pasó con el volcán Nevado del Ruiz disminuyó la ocupación en nuestra ciudad. Los Juegos Nacionales permitirán que la economía en temas de turismo se reactive y tengamos unas ocupaciones altas para que la economía se dinamice en toda la ciudad”, analiza Juan Pablo Alba, director de la asociación hotelera en el departamento.

Sin embargo, debido al ir y venir de las delegaciones, Alba reconoce que las cifras de ocupación de hoteles podrían fluctuar en algunos días. Eso sí, esa posibilidad no impide que el experto compare el impulso económico de la temporada deportiva con el de la Feria de Manizales y las vacaciones de mitad de año.

Más allá de los hoteles

Para esta celebración, el sector transporte será uno de los movilizadores económicos, así como de competidores y sus equipos, de acuerdo con Jorge García, profesional de Estudios Económicos y Competitividad de la Cámara de Comercio de Manizales, quien prevé una gran demanda de bienes y servicios.

García define a las justas deportivas como un impulso importante para jalonar la economía, especialmente en medio de la desaceleración económica que vive el país o, en términos más simples, el analista avizora “desencadenamientos productivos que terminan generando beneficios para las empresas y la creación de empleo”.