LA PATRIA| MANIZALES

Cuatro años de condena por violencia intrafamiliar le dieron al policía Pedro Antonio. Pidió domiciliaria, pero le confirmaron en segunda instancia la negativa de ese beneficio.

Lo hizo el Tribunal Superior de Manizales, tras la apelación del abogado del agresor. La afectada dijo que el 20 de abril del 2020 fue agredida físicamente por su pareja, con quien ajustaba dos años de convivencia en Marquetalia.

Relató que su esposo entró a cuarentena desde la mañana del viernes antes de los hechos y que el sábado lo invitaron a jugar cartas.

Relato

"Fue e ingirió licor. Lo acompañé un rato y luego preferí irme para la casa. Mi hija le puso pasador a la puerta, de lo que no me di cuenta. Me desperté a las 6:00 de la mañana porque Pedro me marcó, estaba furioso, que lo habíamos dejado en la calle. Fui y lo busqué donde el amigo, pero no hizo caso. A eso de las 11:00 de la noche estaba muy borracho, se acostó y le ayudé a quitarse la ropa. Se quedó dormido, posteriormente entré al cuarto donde estaba él, se despertó, levantó la cabeza y me preguntó que dónde estaba su celular. Le contesté que no sabía. Empezó a insultarme y a pedirme que le devolviera el equipo", narró la mujer.

Y añadió: Se paró de la cama y me agarró del cuello con las dos manos, me tiró a un sofá mientras me seguía cortando la respiración. Se me empezó a ir el aire, a ver borroso, el niño comenzó a gritar y le decía que me soltara. Con esos gritos, la niña de 8 años se despertó y al ver que él está encima mío, se le tiró y lo cogió del cuello por detrás.

"Pedro me soltó una mano y con la otra empujó a los dos niños y los tiró al suelo, pero me seguía apretando con una mano. Me logré enderezar y no tuve otra opción y lo mordí en una pierna. Así me soltó, salí corriendo con los

niños y me pude encerrar en un cuarto, con pasador. Estaba en shock, mareada, muy asustada, los menores llorando, pude llamar a la Policía y la patrulla vino al momentico".

"Ya me había agredido verbal y físicamente, pero nunca denuncié. Eso fue el 15 de octubre del 2018, tengo el documento de la atención médica de esa ocasión. Ahora cuento con múltiples hematomas en el cuello, inflamación, laceraciones en brazo izquierdo, mucho dolor en la garganta, se me olvidan las cosas. La doctora me dijo que eso pasaba por la falta de oxigenación en el cerebro, por la estrangulación".

Cuatro años

La pena fue apelada ante el Tribunal. El sentenciado pidió prisión domiciliaria como cabeza de familia, negada dos veces. Solicitó permiso para laborar en un bar y billar de Marquetalia.

Dijo que debía responder por su padre adulto mayor (85 años) y por su hija menor (14), pero no se demostró que estén en abandono, en situación de riesgo o enfrentando una inminente vulneración de sus derechos, dado que cuentan con otros miembros de la familia que deben acudir ante la ausencia de Pedro.