Las denunciantes aseguran que como ellas, otros empleados terminaron engañados por la llamativa promesa de empleo.

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Las denunciantes aseguran que como ellas, otros empleados terminaron engañados por la llamativa promesa de empleo.

Dos mujeres vieron en la promesa del propietario de una empresa, una oportunidad de trabajo inigualable, más aún por el sueldo que ofrecía, algo difícil de ver en Manizales. Esta se dedica supuestamente a ofrecer ayudas pedagógicas en Europa y Estados Unidos.

Sin embargo, desde que ingresaron empezaron a ver demoras en los pagos y en la afiliación a pensiones y cesantías. El hombre les pidió paciencia, pero esta se agotó y acudieron al Ministerio de Trabajo para que medie en la situación.

Una de ellas comentó que el subgerente de la empresa la contactó el año pasado y tras una reunión le ofrecieron un sueldo de $9 millones. Como está registrada en Cámara y Comercio, creyó en la seriedad de la oferta y empezó a laborar en diciembre.

"Debíamos contratar a monitores, era como un tipo de call center y, desde una pantalla grande, seis asesores observaban la conducta de los estudiantes a través de cámaras. Pasaron cuatro meses y no recibí ningún pago", dijo la denunciante.

La mujer explicó que fueron muchas promesas y entre esas estaba una supuesta autorización que garantizaba la entrega de 5 mil dólares. Cuando acudió al banco, le mencionaron que ese documento no se exigía, solo debía hacerse la transferencia, pero tal monto de dinero no existía.

Al notar que cada vez eran más frecuentes las anomalías, la denunciante decidió investigar y empezó a conocer mensajes anónimos de otras personas que aseguraban haber sido estafadas.

Empezó a buscar nuevamente al propietario, programaban citas, le incumplía y no le quedó más que enviarle audios, en los que amenazó con tocar puertas para denunciar lo que ocurría, pero las mentiras siguieron hasta el sol de hoy.

 

Sueños en grande

Una empresa que pretendía abrir sedes en el Eje Cafetero, Bogotá, Tunja, entre otras ciudades. La oportunidad de trabajo para unas 8 mil personas. Unos salarios altos. Eso llevó a otra mujer a creer en el proyecto.

En enero de este año la contactaron también con las mismas promesas. Asistió a entrevistas, ganaría $9 millones, le explicaron en qué consistía la aplicación de soporte educativo. A finales de mes iniciaron sus labores en la empresa.

Las promesas como nueva trabajadora incluían una guardería para los hijos de los trabajadores, así como la dotación de un carro a las cabezas de equipo. Pero pronto empezaron a incumplir con los pagos, les decían que el dinero estaba en el exterior y tardaba mucho nacionalizarlo.

Luego le pidieron 15 días porque la plata debía llegar a unas cuentas a Puerto Rico y dice que así la han tenido hasta ahora, sin recibir un solo peso. Ante sus quejas también la citaron a reuniones, le mostraron todo un proyecto ambicioso que requería de paciencia, pero esta se agotó.

"Cada ocho días nos salían con un cuento, que el dinero estaba retenido, que estaban en trámites. Nos reunimos con empresas importantes e íbamos a participar en ferias, pero todo con nosotros lo cancelaron cuando vieron que no estábamos contratando a nadie", recordó la afectada.

Sobre la seguridad social, el mismo problema surgió. No le habían pagado nada y estaba sin protección. Le hicieron firmar un documento por 2 mil 500 dólares, pero a la hora de cobrarlo, no existía dicho dinero.

 

El negocio se dañó

Al conocer que la denuncia en su contra llegó a LA PATRIA, el empresario señalado dialogó con este medio en junio pasado y aseguró que múltiples problemas habían surgido, por lo que no logró pagar a tiempo los salarios, pero su intención era cuadrar las deudas.

Añadió que en un mes les pagaría a las denunciantes. Sin embargo, pasaron ya dos meses y no ocurrió nada. Ante la queja de las mujeres, el hombre explicó que no les ha quedado mal "por gusto, y menos por placer".

Dijo que con el escarnio público no se iba a solucionar la situación y seguía buscando maneras de llegar a una concertación.

"Jamás he negado que les adeudo el dinero del salario y menos he sido renuente al diálogo y la conciliación. Solo que el tema económico no ha sido fácil para un proyecto que tuvo que morir sin poder nacer", finalizó.

 

Exposición a sanciones

"Se expone este empleador es precisamente a que Mintrabajo lo cite a conciliar a efectos de que pague todas las acreencias laborales, créditos y de seguridad social, además de sanciones", indicó el abogado Carlos Vinasco.

Sumado a eso, las administradoras de pensiones y riesgos laborales, así como las EPS podrían iniciar procesos de cobro por no realizar los aportes a seguridad social en su debido momento, e incluso podría también entrar en el pleito la Unidad de Gestión Pensional y Parafiscales.

Las afectadas podrían acudir en instancias siguientes ante jueces laborales a reclamar sus derechos porque hubo un contrato de trabajo, para solicitar el pago de todas las prestaciones, más lo que determine el juez.

Sobre la posibilidad de que el señalado se declare en insolvencia, las acreencias laborales tienen prelación respecto de otras exigencias, incluso estando a la par del pago de impuestos.

 

Acuda

Si usted presenta problemas por incumplimientos de su empleador, puede acudir a la dirección territorial del Ministerio de Trabajo ubicada en el piso 3 del edificio Cumanday, en la calle 20 #22-27, de Manizales.

También se puede comunicar a la línea 6013779999 o al 018000112518.

 

Lo que más incumplen

Según el Ministerio de Trabajo, hay cinco conductas de los empleadores que más denuncian los dependientes:

- Incumplimiento de las normas de seguridad y salud.

- Incumplimiento por Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo.

- Incumplimiento a las obligaciones especiales.

- No pago de las prestaciones en los periodos establecidos por la ley.

- No pago del salario en los periodos establecidos.

 

Motivos por los que más se imponen sanciones

- Incumplimiento de las normas de seguridad y salud.

- Incumplimiento a las obligaciones especiales.

- Incumplimiento por Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo.

- Rehusarse a presentar informes o documentos requeridos en el curso de investigaciones administrativas, ocultar, impedir o no autorizar acceso a archivos.

- No pago del salario en los periodos establecidos.

 


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