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Foto | Cortesía | LA PATRIA | PEREIRA
El reto que sigue después de la aprobación de la política pública es la implementación y la asignación de recursos
La comunidad LGBTI de Risaralda presentó un documento que pretendía ser política pública en el departamento y después de cuatro debates fue aprobado.
Los colectivos que presentaron el proyecto, redactaron un documento que busca garantizar la protección y reconocimiento de los derechos de las poblaciones con orientaciones sexuales e identidades de género diversas.
La decisión de los diputados fue unánime. Con 12 votos a favor y ninguno en contra, empieza un nuevo camino para hacer cumplir los derechos de la comunidad LGBTI en el departamento.
La aprobación de esta política, que tendrá vigencia entre 2025 y 2035, fue celebrada por colectivos, organizaciones sociales y líderes que han trabajado en su construcción. José Fernando Giraldo, presidente de la Fundación Plataformas, una de las organizaciones que impulsó la iniciativa, destacó la importancia del proceso.
"Es un gran avance en el reconocimiento de derechos. Esta política nos permitirá tener un marco normativo sólido que oriente la gestión pública en favor de la comunidad LGBTI, con acciones concretas en salud, educación, seguridad y participación política", afirmó Giraldo.
Un documento construido desde la comunidad
La política aprobada en Risaralda incluirá acciones en educación, salud, seguridad, participación ciudadana, empleo y participación política. Giraldo enfatizó que la construcción de la política se hizo desde las bases.
Fue un trabajo mancomunado entre diferentes organizaciones y colectivos en el departamento, en el que lograron identificar las principales necesidades que tiene la población LGBTI en el departamento, y por eso se llevó hasta la asamblea.
Según Giraldo, la política pública servirá como una carta de navegación para garantizar el acceso de esta población a derechos fundamentales.
La comunidad LGBTI, al igual que otros grupos de especial protección en el país –como las mujeres, las personas con discapacidad, los pueblos indígenas y afrodescendientes, la niñez y el adulto mayor–, requiere un enfoque diferencial que responda a sus desafíos particulares.
"El reconocimiento de derechos no es solo un tema de inclusión, sino de garantizar calidad de vida. Esta política pública permitirá la creación de mecanismos concretos para que las personas LGBTI puedan acceder a servicios básicos sin discriminación y tengan mayores oportunidades en el ámbito laboral y educativo", explicó el presidente de la Fundación Plataformas.
El reto de la implementación
La aprobación de la política pública en la asamblea representa un paso importante para garantizar los derechos, la eficacia del mismo se verá reflejado en la ejecución.
Por eso los promotores señalan que ahora todo dependerá de la asignación de recursos y del compromiso de las autoridades departamentales y municipales.
Giraldo advirtió que, para que esta iniciativa se convierta en una realidad, es fundamental que el plan estratégico cuente con financiación suficiente.
"Fuimos muy enfáticos ante la Asamblea Departamental: esta política necesita recursos para que no se quede en letra muerta. Ahora viene un proceso técnico en el que se deben definir los proyectos y actividades específicos, cada uno con su respectivo presupuesto", señaló.
Expectativas y vigilancia ciudadana
Los promotores del proyecto manifestaron que el primer paso ya se dio, pero que seguirán atentos para que se dé un correcto cumplimiento de la política. Para eso, aseguran que harán seguimiento a su implementación.
La Fundación Plataformas y otros colectivos han insistido en la necesidad de un compromiso real por parte de la administración departamental, de manera que la política no se convierta en un simple documento sin impacto en la vida de las personas.
"Sabemos que la aprobación es solo el primer paso. Ahora debemos trabajar para que las acciones contempladas en la política se traduzcan en cambios reales y en mejoras en la calidad de vida de la comunidad LGBTI en Risaralda", concluyó Giraldo.
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