LA PATRIA | Manizales

El presidente Gustavo Petro confirmó este sábado (1 de marzo) a Julián Molina como el nuevo ministro de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), en reemplazo de Mauricio Lizcano, quien abandonó el cargo a finales de enero.

Con este nombramiento, el gabinete ministerial sigue tomando forma en la etapa final de su gobierno.

Molina asume el cargo luego de que el partido de la U presentó una terna de candidatos para dirigir la cartera responsable del desarrollo digital y las telecomunicaciones en el país. En la lista también figuraban Said Naví Lamk Beltrán, director ejecutivo de la Red Nacional Académica de Tecnología Avanzada de Colombia (Renata), y Jhon Alejandro Linares Cambero, exgerente del Canal 13.

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Un perfil con experiencia en el sector TIC

Julián Molina ya cuenta con experiencia en el Mintic, pues trabajó en esta entidad durante la gestión de Lizcano. Además, entre el 2020 y el 2022, se desempeñó como superintendente de Subsidio Familiar bajo el gobierno del expresidente Iván Duque.

Su conocimiento del sector y su trayectoria en entidades gubernamentales fueron factores clave para su selección.

Los retos que enfrenta al frente del Mintic

Molina llega al Mintic en un momento crucial para la agenda digital del país. Uno de sus principales desafíos será cerrar la brecha de conectividad, garantizando el acceso equitativo a telefonía móvil, datos y conexión a internet de calidad, especialmente en zonas rurales y apartadas donde persisten dificultades de acceso.

Otro reto importante será la formación de talento en tecnologías de la información. Actualmente, Colombia enfrenta un déficit significativo de profesionales en áreas digitales, lo que ha generado preocupación en la industria.

El Mintic deberá fortalecer programas de capacitación en habilidades digitales para reducir la brecha laboral y preparar a la población para la economía digital.

Además, Molina asumirá la tarea de garantizar estabilidad en el mercado de telecomunicaciones, en un contexto donde algunas empresas enfrentan presiones financieras y cambios estructurales.

La crisis de operadores como WOM y Tigo ha evidenciado las dificultades del sector, mientras que la posible integración entre Tigo y Movistar podría concentrar el 90 % del mercado en solo dos compañías, planteando retos para la competitividad y la calidad del servicio.

En este contexto, la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) jugará un papel clave en la supervisión del mercado y en la adopción de medidas regulatorias para equilibrar la competencia. El reto de Molina será garantizar que estos cambios no solo beneficien a las grandes empresas, sino que también mejoren los servicios para los consumidores y fomenten la inversión en infraestructura tecnológica.

Con estos desafíos en el horizonte, el nuevo ministro de las TIC tendrá la responsabilidad de liderar una agenda digital que impulse el desarrollo del país y asegure la inclusión tecnológica de todos los colombianos.

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