Lo importante era ganar, para zafar la goleada del comienzo ante Nacional y quitarse de encima la bestia negra que representó Fortaleza en 2024 con cuatro victorias en igual número de juegos por Copa y Liga. Y se logró sobre el final, en un remate de partido de esos que se celebran con éxtasis, dejando en segundo plano la presentación.

Otra vez Once Caldas vendió la idea de ser un equipo de medios tiempos. Fatal el primero, sometido por un rival que creó las oportunidades, tuvo la pelota y concretó a la media hora por intermedio de Andrés Ricaurte en acción por la izquierda, su sector vulnerable. Menos mal, Dayro Moreno, de penalti, evitó irse perdedor al vestuario.

En el complemento operaron los cambios y con golazo de Joel Contreras, poco amigo de las redes, llegó la victoria. Hubo alza progresiva en el rendimiento, pero se está lejos del nivel del campeonato pasado y hay piezas que aún no cogen la forma. Entendible de alguna manera, en apenas dos fechas de torneo.

Probados Mateo Rodas y Jerson Malagón como centrales, no tendrá problemas Jéider Riquett cuando esté disponible, para estar al lado de Jorge Cardona, firme en el puesto. Queda por verse Juan Felipe Castaño. Con Cuesta y Patiño, a pesar de las ventajas que otorgan por las bandas, la zaga sería la misma del pasado.

Volvió a ser figura James Aguirre, uno de los más completos goleros del país. Clave cuando presionó Fortaleza. Es decir, atrás se repite la nómina y si seguimos de largo, los nombres son los mismos: Zapata, Beltrán, Barrios y Dayro, señal de que los refuerzos no son tales, y si esto coincide con que el plantel no despega, el resultado es lo que estamos viendo.

Si Herrera se equivocó con las variantes en Medellín, esta vez acertó. Claro que su decisión de poner la pareja Mateo-Rojas como volantes de marca, cuando en ocasiones anteriores ha sido agresivo en casa jugando con Mateo-Alejo fue extraña y más ubicando al manizaleño como conductor teniendo que replantear sin finalizar el primer período.

De tal manera que, con el resultado abajo y una pésima presentación de casi todos hasta ese momento, era previsible que cualquiera que saliera fuera abucheado. Le tocó a Alejandro García. Luego el técnico en la rueda de prensa recriminó el comportamiento del púbico, sin detallar que lo expuso, entregándolo en bandeja y ese monstruo de mil cabezas no perdona.

Tampoco fue razonable la no convocatoria del uruguayo Hugo Dorrego. Imposible saber si va a triunfar, pero el mensaje de desmotivación para el futbolista –así empezó con Lucas Ríos– fue claro, carente además de estrategia, porque significaba gancho para la tribuna.

Retornando sobre el juego, gracias Sebastián Oliveros. Que desarmada le pegó a Fortaleza.

Sacó a Kevin Flórez, quien hacía estragos por la izquierda, y a Luis Sánchez, con más oficio como armador que Andrés Ricaurte quien caminaba la cancha y terminó con cinco atrás.

Once Caldas aprovechó y sumó sus primeros tres puntos. Los técnicos ¡por Dios! 

P.D.: 13.499 seguidores en Palogrande. Gran asistencia habida cuenta de que fue sábado en la tarde, ante un contendor de poca historia e interés, luego de la estruendosa derrota frente a Nacional y con un grupo sin contrataciones de peso, que definitivamente aspira a hacer una buena campaña con lo mismo.

Hasta la próxima...