LA PATRIA | Manizales*

El desamor es una de las causas que lleva a los caldenses al suicidio, así lo reseña el Laboratorio de Gobierno de la Universidad de La Sabana (GovLab) que se dio a la tarea de analizar las tasas de suicidio en el país en lo corrido de este año, según los reportes oficiales de Medicina Legal.

Datos analizados por el GovLab sugieren que en lo que va del año la tendencia de suicidios, en comparación con el año pasado, presenta una leve disminución. El análisis permite concluir que los hombres se quitan más la vida que las mujeres. Entre las causas frecuentes están el desamor, la salud mental y las razones económicas.

En el departamento de Caldas, las cifras de enero a julio del 2023 indican que se presentaron 58 suicidios, mientras que, en el mismo periodo del año 2024, se presentaron 52. Aunque en el departamento, las causas que más influyen para tomar esta decisión son el desamor, las enfermedades mentales y las causas económicas, también se pudo definir que en una ciudad como Manizales los rangos de edad de las personas que se quitan la vida también varían.

En ese orden de ideas, el análisis pudo determinar que para el año 2023 los suicidios se presentaban más entre los jóvenes de entre los 20 y 24 años, mientras que para el 2024, se destacan también los casos de personas entre los 50 y 46 años.

En Colombia, la cifra de suicidios en el periodo enero a julio del 2024 fue de 1.677 casos. En comparación, para el mismo periodo del año 2023 el número total fue de 1.836, es decir se presentó una disminución del 8,66% frente al mismo período del año anterior.

Ellos, los más proclives

Entre los hallazgos del análisis, en 2024, se pudo encontrar que los hombres son los más propensos a quitarse la vida, registrando un 80,26% de los casos reportados, además suelen usar métodos más definitivos para quitarse la vida. En cuanto a los suicidios femeninos, el método más empleado suele ser con el uso sustancias tóxicas.

En mapa creado por GovLab estableció que las edades más propensas para cometer suicidio están entre los 20 y 25 años a nivel nacional. En hombres las edades son entre 20-24 años y 25-29 años; mientras que en mujeres la prevalencia es de los 20-24 años, seguido por aquellas entre los 15-17 años.  También se encontró que 2.283 de los casos corresponden a personas solteras y 1.181 a individuos en unión libre.

Según la información obtenida por el GovLab, los tres motivos aparentes más comunes, son enfermedades de salud mental, desamor y conflictos con pareja o expareja. De igual manera, el día y la hora donde más personas se quitan la vida es el domingo a medianoche.

Para los menores de edad, los suicidios son más comunes los lunes mientras que los suicidios entre mayores de edad se dan con mayor prevalencia los domingos, es decir que la tendencia indica que los casos aumentan a medida que se acerca el fin de semana, disminuyendo después.

*Con información de Laboratorio de Gobierno de la Universidad de La Sabana (GovLab).

El acompañamiento de psicólogo o terapeuta especializado debe ser constante para erradicar todo asomo de riesgo suicida.

En el año 2003 la Organización Mundial de la Salud estableció el 10 de octubre como el Día mundial para la prevención del suicidio. En Colombia se programan actividades todo el mes.
 

Atienda cada expresión negativa

Yahira Guzmán, psiquiatra y docente de la Universidad de La Sabana, explica que “no necesariamente una persona que atenta contra su vida debe tener un diagnóstico de salud mental. Esas conductas se pueden presentar porque se juntan muchos factores de alerta y llega un evento detonante –una ruptura amorosa, pérdida económica, desastre natural, etc.– que puede presentar ideación o conducta suicida”.

“Nunca reste importancia a una persona que expresa que se quiere morir o que no quiere seguir viviendo, debemos considerarla en riesgo y ese primer contacto es clave para poder ayudarla a que se entere de lo que está pasando”, comenta la experta.

Pregunte directamente

Juan Camilo Restrepo, PhD en Psicología Clínica e investigador de la Universidad de La Sabana, asegura que “una de las variables predictoras más importantes para las ideas suicidas es que algunas personas no ven salida a los problemas. Por ejemplo, una persona con una enfermedad crónica o aquella que cree que no hay esperanza”.

Si bien no existe una señal contundente de que alguien podría intentar quitarse la vida, cuando intuimos que una persona puede estar en una situación agobiante y presenta sentimiento de desesperanza, “lo mejor que podemos hacer es preguntar directamente: ‘¿Sientes que esta situación tiene solución o salida?'”, asegura Restrepo.

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