Los ejercicios de pilates no solo son una tendencia en el fitness; son, además, una herramienta poderosa en la lucha contra el dolor lumbar crónico. Ofrecen diferentes beneficios que aportan más que valor terapéutico convencional, pues mejoran la salud general, la vida social y la flexibilidad.

Johana Hernández, fisioterapeuta y especialista en salud ocupacional de Colsanitas Seguros, comentó que estos se centran en fortalecer y estabilizar los músculos centrales. Allí se incluyen los abdominales, lumbares, pélvicos y glúteos.

El pilates, especificó la experta, se debe trabajar mediante el control en los movimientos, buscando fortalecerlos para evitar lesiones. Debe haber atención al detalle y coordinación en la respiración, para una mayor eficiencia.

El pilates es clave, desde distintos puntos

El pilates también es clave para:

• El fortalecimiento muscular. Mejora la estabilidad de la columna y reduce la presión sobre las estructuras de soporte de la espalda.
• Mejora de la postura. Corrige desequilibrios musculares y hábitos posturales incorrectos.
• Aumento de la flexibilidad. Reduce la rigidez muscular y mejora el rango de movimiento.
• Conciencia corporal. Promueve la conexión mente y cuerpo.
• Rehabilitación. Adapta las necesidades individuales para fortalecer músculos débiles y mejorar la flexibilidad.

Como complemento para la salud

Existen varias medidas complementarias que mejoran y previenen el dolor de espalda:

1. Ejercicio cardiovascular

Caminar, nadar o montar en bicicleta ayuda a fortalecer los músculos de la espalda. Esto promueve la circulación sanguínea, reduce la inflamación y mejora la salud osteomuscular.

2. Estiramiento regular

Realizar estiramientos suaves y mantenidos durante unos minutos cada día, reduce la tensión muscular y mejora el rango de movimiento de la columna vertebral.

3. Mantener un peso saludable

Mantener un peso saludable, a través de una dieta equilibrada y ejercicio regular, aminora la carga sobre la espalda y previene el dolor.

4. Adoptar una postura adecuada

Es importante tener recta la espalda y los hombros hacia atrás, al estar de pie y sentarse; y evitar encorvarse o encoger los hombros.

5. Levantar objetos correctamente

Utilizar la técnica adecuada al levantar objetos pesados ayuda a prevenir lesiones. Hay que doblar las rodillas y levantar desde las piernas, en lugar de doblar la espalda.

6. Mantener una buena salud mental

El estrés y la ansiedad contribuyen al dolor de espalda. Practicar técnicas como la meditación, la respiración profunda o el yoga, reducen la tensión muscular y mejoran el bienestar general.

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