
Tras la muerte violenta de Yoani Antonio y desde que la familia comenzó con la sucesión, en el 2009, empezó el constreñimiento en contra de la pareja y el hijo del fallecido.
La familia de Yoani Antonio Ramírez Gómez, de 31 años, no solo soportó el dolor de que ser querido fuera asesinado a bala, sino que después del homicidio ha enfrentado una serie de presiones para no reclamar la herencia que les quedó.
Por esta situación, un hombre afronta un proceso por el delito de constreñimiento ilegal agravado, ante el Juzgado Séptimo Penal del Circuito de Manizales.
La preparatoria para el juicio fue el 22 de octubre del 2024 y se decretó la práctica de ciertas pruebas solicitadas por la Fiscalía General de la Nación, situación que apeló su abogado, por lo que pasó al Tribunal Superior de Manizales, que abstuvo de pronunciarse y devolvió el proceso para que siga su marcha.
Paso a paso del caso
- Tras la muerte violenta de Yoani Antonio y desde que la familia comenzó con la sucesión, en el 2009, empezó el constreñimiento en contra de la pareja y el hijo del fallecido.
- Según el ente acusador, el sujeto presionó ilegalmente a esa mujer y al hijo de ella, usando la violencia.
- "Empezará una guerra de muerte si insisten en reclamar las propiedades o en negociarlas", les habría advertido.
- Se trataba de bienes inmuebles urbanos y rurales en Manizales y Bogotá.
- "Las coacciones y amenazaron psicológicas empezaron cuando el procesado salió de la cárcel Doña Juana, de La Dorada, tras condena por un doble homicidio en Manizales en el 2005. Aprovechó la libertad condicional que le dieron en enero del 2021. Le dieron periodo de prueba de 19 años".
- "Llamó al hijo del fallecido y le dijo que se olvidara de la finca La Isla, en La Manuela (Manizales) y reiteró la amenaza de guerra de muerte. Esto porque supo que celebró el cumpleaños en ese predio sin su consentimiento. Por teléfono se comunicó con la pareja de Yoani Antonio y la amenazó de nuevo con que no podía vender o negociar las propiedades".
- No contento con eso, explicó la Fiscalía, coaccionó a través de la abogada a la pareja del asesinado a que firmara un documento para que el hoy procesado se encargara de una propiedad en Las Palmas (Manizales). Esto porque supuestamente la mujer no tenía la capacidad económica para la sucesión.
- Eso pasó hace 4 años, ella firmó por miedo, pero el documento en la Notaría Segunda no se ha hecho efectivo porque el hijo de Yoani Antonio era menor de edad y no pudo poner su rúbrica.
- El procesado siguió constriñendo a madre e hijo con el argumento de que esas propiedades le pertenecen.
- Habla de la casa en Las Palmas, la finca La Isla, apartamento en Bogotá y casa en La Enea, en Manizales. "Produjo en ellos una clara situación de indefensión, pues no les permite ejercer sus derechos patrimoniales como legítimos propietarios", manifestó el ente acusador.
Su condena
El procesado en este caso tuvo condena de 37 años y 8 meses por participar, junto a otro hombre, en un doble homicidio el 18 de marzo del 2005, en la carrera 22 con calle 25 de Manizales.
Ese día asesinaron a José Óscar González Grisales, representante a la Cámara por Caldas del Partido Liberal y al médico Ricardo Augusto Serna Bedoya, quien se encontraba en la oficina del congresista buscando apoyo para un trabajo. González Grisales falleció en el sitio de los hechos, mientras que Ricardo Augusto murió en el centro asistencial donde fue remitido.
Cepillo, autor
El 18 de octubre del 2008 mataron a Yoani Antonio Ramírez Gómez, de 31 años, en la finca Villa Natalia (vereda Morrogacho). Dos sicarios entraron a una fiesta y dispararon siete veces contra Ramírez. Las autoridades, inicialmente, relacionaron el crimen con un ajuste de cuentas.
Este crimen fue reconocido por Sebastián González Ortega (foto), alias Cepillo, sicario que cuenta con un prontuario criminal que bordea los 33 homicidios, cuyas sentencias superan los 200 años. Él cumplía órdenes de los grupos de limpieza social de las Auc.
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