LA PATRIA| MANIZALES

El 11 de diciembre del año pasado se conoció la muerte de una bebé de 21 meses de nacida, en un centro asistencial de Soacha (Cundinamarca). 

La madre de la víctima afirmó que la niña se ahogó, pero los análisis médicos daban cuenta de un posible homicidio, maltrato y abuso sexual.

La pareja fue detenida en un principio. Esta la integran una joven, de 20 años, y un hombre, de 42, este último caldense. Sin embargo, los dos fueron dejados en libertad hasta que se tuviera el dictamen de Medicina Legal.

Ambos abandonaron esa ciudad porque temían por su seguridad, debido a amenazas, dicen.

LA PATRIA conoció este miércoles 22 de enero el dictamen de la necropsia de la bebé y este habla de "lesiones en el cuello, compatibles con mecanismo de sujeción. Hematomas compatibles con el síndrome de zarandeo. Además, hallazgos en el ano de la menor".

"La causa de muerte es violenta y se les pide a las autoridades ampliar la información de las circunstancias en las que pudieron ocurrir los hechos", reza el documento.

LA PATRIA consultó con dos expertos en necropsias y explican lo consignado en el documento: "La bebé fue golpeada en la cabeza, sacudida de manera violenta y abusada".

Se espera la decisión que pueda tomar la Fiscalía en este proceso. Un juez de la República determinara quiénes son los responsables de los señalamientos y si los papás de la niña tienen relación con eso o no.

"Vivíamos enamorados de ella, era divina y hermosa": padres de la bebé

LA PATRIA habló este jueves 23 de enero con los padres de la bebé, quienes abandonaron Soacha, según ellos, por amenazas de muerte y porque después de los hechos algunos medios mostraron el conjunto donde habitaban.

"Ese 11 de diciembre nos levantamos a las 6:30 de la mañana, como todos los días. Toda la noche estuvimos pendientes de nuestra bebé, de si lloraba, le revisábamos el pañal y todo eso. Le cambié la pijama, le di tetero, la llevé a la sala en su coche. Le tomé unas fotos, pues la familia nos pedía a diario que les enviáramos imágenes de cómo estaba creciendo. Vivíamos enamorados de ella, era divina y hermosa".

Contó la mamá que la bañó, la acostó, le quitó el pañal y se la entregó a su esposo para que la ubicara en la sala a recibir el sol.

"Cuando salí del baño él me dijo que la bebé hizo chichí y popó, que dónde estaban los pañitos. Pero vimos algo raro en ella, no reaccionaba, estaba pálida, comenzamos a reanimarla, le daba respiración boca a boca, le pegaba en el pechito para sacarle los gases, le hicimos de todo para que volviera en sí".

Indican que le pusieron una cobija y corrieron como locos, bajaron los cinco pisos del edificio para tomar el carro y llevarla a un hospital, donde falleció la menor. "Quedé en shock, era algo de no creer, muy terrible".

Anotó que un psicólogo los abordó y le contaron todo, lo mismo que a la Fiscalía. Luego les permitieron entrar a despedirse de la niña.

"Tenía aparatos pegados en el pecho y un morado en la quijada, que tal vez se le produjo cuando intenté revivirla. No creíamos lo que vivíamos en ese momento. Posteriormente un policía nos dijo que estábamos detenidos por homicidio, abuso sexual y maltrato. Una pesadilla, perdimos a nuestra bebé y ahora nos señalaban de hacerle daño. Le expresé a la médica que cómo era posible eso, si lo que hicimos fue llevar a nuestra hija porque no reaccionaba. Me respondió: 'es que encontramos unas cositas más'".

LA PATRIA le preguntó a la pareja sobre el dictamen de Medicina Legal que conoció y que, según expertos, significa que la niña fue golpeada, sacudida de manera violenta y abusada, pero se abstuvo de referirse a esto. Indicaron que prefieren esperar que les explique bien el abogado los términos que se plasman en ella.

No obstante, frente a los señalamientos que recibieron en el momento de la muerte de la menor, insisten en que son acusaciones aberrantes.

"Nos detuvieron, pero 36 horas después quedamos libres, ni nos presentaron ante un juez. Eso sí, salimos desplazados. ¿Quién le va a hacer daño a su propia hija?, eso solo cabe en una mente retorcida, no en la nuestra. La niña nació con un hematoma en su cabeza y estuvo dos días hospitalizada. Para nosotros fue una muerte natural".

No obstante, el dictamen de Medicina Legal muestra que no fue así.

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