LA PATRIA | Anserma

A sus 80 años de edad, el ansermeño Alejandrino Acevedo Gonzales camina  todos los días desde su casa, ubicada cerca al estadio municipal, hasta la oficina de la Asociación San Vicente de Paúl, de la cual es su presidente desde que tiene memoria.Es un hombre hecho de hierro y poco se enferma, dice su sobrino Alejandro. En el hospital no recuerdan haberlo atendido en alguna ocasión y tampoco tiene historia médica. Alejandrino atribuye su buena salud a que recurre a la medicina naturista para curar sus achaques.Con su infaltable gorra y chaleco camina a diario cerca de 15 cuadras, porque él considera que este solo ejercicio lo mantiene saludable. En la casa de San Vicente funciona también el Mariachi Anserma, agrupación que él fundó y con la cual anda por pueblos y veredas como su mánager y presentador.

En Anserma, además de presidir las juntas directivas del centro de promoción humana y la Sociedad de Mejoras Públicas, la Casa de la Cultura y el Consejo Editorial del periódico Informador de Occidente, Alejandrino sigue en la radio aunque ahora de manera esporádica.Mantiene una voz de locutor que es reconocida en la región desde que dirigió noticieros en la ya desaparecida Voz de Anserma y en estaciones radiales. De hecho, aún es maestro de ceremonia en muchos eventos.Dice que en sus recuerdos aún está el noticiero Plataforma Informativa, que al mejor estilo de los nacionales de esa época contaba hasta con 20 corresponsales en los municipios de Caldas y Risaralda.

En teatros de cineSi hay algo que todavía le produce nostalgia y tristeza a alejandrino es que en Anserma no exista un teatro para la proyección de películas de cine. Lo dice con conocimiento de causa: bajo su cargo estuvieron teatros como el Granada y luego el Ocuzca, desaparecidos con la llegada de sistemas de, VHS, Betamax y Luego DVD. Aun así, con este último medio de proyección fundó un pequeño teatro en la carrera 5 con calle 12, que también cerró sus puertas.Mientras ensaya con los integrantes del Mariachi Anserma, se dispone a atender a los inquilinos de la sociedad San Vicente, que arrienda casa a bajos precios a familias de escasos recursos. En su pequeña oficina conserva libros y textos que dan fe de su apego a la lectura, dice que estar activo y caminar son la fórmula para conservar una buena salud, aun en sus ocho décadas de vida.

Con su jovialidad y una voz cálida alejandrino ha dejado una honda huella en los ansermeños, por esos hace pocos días la Casa de la Cultura Jaime Ramírez

Rojas organizó un homenaje en el que le entregó un reconocimiento, una nueva condecoración por su aporte a la cultura del Municipio.

Alejandrino en sus tiempos de locutor en Anserma.