LA PATRIA | MANIZALES

La historia de la natación clásica caldense se puede resumir en las hermanas Luisa Marina y Adriana Londoño Jaramillo, Carlos Ignacio Henao y Stefanía Gómez.

Ellos, por sus logros, son referentes. El hecho toma relevancia con la presencia de Stefanía Gómez en los Juegos Olímpicos de París 2024. Es la primera vez que un nadador nacido en suelo caldense va a la Olimpiada. Luisa Marina, Adriana y Carlos Ignacio brillaron, pero no fueron a la Olimpiada.

Stefa, así le dicen en el mundo de la natación, llega a París como la reina nacional de los 100 metros pecho. Su récord en el país es de 1.07.92. La marca mundial está en 1.04.13 y la olímpica en 1.04.82.

La manizaleña dijo que llegar a las semifinales sería extraordinario: "Mejorar la marca personal (1.07.92) y buscar la semifinal, entrar sería extraordinario".

César Delgado, su entrenador, explica que es paso a paso: "Es complejo, bueno, hay que estar allá".

El técnico que laboró con Caldas el último ciclo de los Juegos Nacionales, valoró la capacidad y la fortaleza mental de su dirigida: "Tiene confianza, está fuerte y eso nos ayuda mucho para el reto que viene".

El próximo domingo, Stefanía, que hoy está concentrada ya en París, se lanzará en busca de la gloria olímpica. Ella seguirá abriendo el camino que décadas atrás trazaron las hermanas Luisa Marina y Adriana Londoño Jaramillo, y Carlos Ignacio Henao.

Las Londoño Jaramillo

Luisa Marina y Adriana empezaron a nadar a los 8 y 7 años, respectivamente, en la piscina del Club Manizales, orientada por Carlos Julio Paipilla. Desde entonces, fueron nadadoras hasta los 17 años. Luego optaron por sus estudios universitarios ante la falta de patrocinios.

Luisa fue campeona nacional en los 100 metros y 200 metros espalda. Fue medallista de bronce en los Juegos Nacionales de 1980 y estuvo en el podio de los mejores de Caldas ese año.

Adriana, por su parte, brilló en mariposa y libre. También fue medallista en campeonatos nacionales interligas e interclubes. Fueron, además, integrantes de los seleccionados nacionales en una época en la que mandaban las ligas de Valle, Antioquia y Bogotá.

Carlos Ignacio, figura

Carlos Ignacio Henao llegó a la natación por mera casualidad. "Mi hermana menor no sabía nadar y mis padres la ingresaron a clases. El costo era igual por el grupo familiar que por una sola, así que yo también recibí clases y el profesor vio que tenía las aptitudes y comencé a entrenar.", recuerda. Eso fue a los 11 años y hasta que terminó la universidad se dedicó a la natación.

¿Y qué ganó? "Seis medallas de oro por allá en los Juegos Nacionales de Neiva, en 1980". Para ese entonces ya se había ganado la beca para estudiar en Estados Unidos, en la Southern Illinois University at Carbondale. Desde allí regresó para competir por Caldas.

"La natación me dio la oportunidad de conocer muchas ciudades en Centro y Suramérica participando en campeonatos Centroamericanos, Suramericanos, Latinos y Mundiales. Lo más importante que me dio la natación fue el estudio por la beca que recibí en USA", concluye.

Son 13

Antes lo hicieron el atleta Hernán Barreneche (México 1968 y en Múnich 1972), los tiradores Hernando Hoyos (Roma 1960) y Jorge Enrique Henao (Múnich 1972), los ciclistas Rubén Darío Gómez (Roma 1960 y Tokio 1964), Julio César Rodríguez (Corea 1988) y Nelson Cacaíto Rodríguez (Corea 1988) y el futbolista Cristian Bonilla (Río de Janeiro 2016); Lorena Arenas en atletismo (Tokio 2020), Jhancarlos González (Tokio 2020) en skateborarding; Jhon Freddy Castañeda (para-pesas); María Carolina Velásquez en triatlón, Stefanía Gómez en natación (París 2024) y Juan Esteban Patiño (paratriatlón).

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