Fotos | Rubén Darío López | LA PATRIA
Desde tempranas horas en la tarde del domingo el coliseo de Ferias y Exposiciones Alfonso Hoyos se empezó a llenar de caballistas y de aficionados. Aunque se cumplió la edición XXXI de la esta Feria, la misma cuenta con una tradición de 40 años, ya que la primera fue entre el 18 y el 20 de agosto de 1984. En algunas ocasiones debió ser suspendida por problemas de orden público y presencia de grupos armados en la región. Con el paso de los años, los pensilvanenses han adquirido una cultura caballística donde con respeto a los equinos se les cuida, se les aprecia y admira.
LA PATRIA | PENSILVANIA
Más que una exposición de caballos de alta calidad, la XXXI Exposición Equina fue un encuentro multicultural para propios y visitantes. Desde un mes antes del primer puente festivo de junio, los organizadores con la Asociación de Caballistas de Pensilvania y la Administración municipal dispusieron de la logística y trabajo coordinado para que todo estuviera debidamente dispuesto en orden y a tiempo, para el gran evento caballístico anual del municipio.
En esta edición tuvo a 250 ejemplares compitiendo en pista, aunque llegaron otros 200 caballos más para las cabalgatas y la raspa.
La economía se reactivó, hoteles y restaurantes llenos, ventas formales e informales, el coliseo Alfonso Hoyos Giraldo con lleno hasta las banderas, raspa y cabalgatas por doquier; alegría, disfrute en familia, reencuentro de amigos y derroche de alegría y cultura.
Para los niños también hubo fiesta con el concierto de Karol G de “Yo me llamo” y con el concurso de caballitos de palo.
325 niños acompañados por padres y adultos participaron en la elaboración de los caballitos de palo con el fin de asistir a las competencias preparadas para ellos.
Por primera vez en la Feria Equina se ofreció un concierto dirigido a toda la familia, especialmente a los niños quienes en el CIC Centro de Integración Ciudadana disfrutaron con Karol G de “Yo me llamo”.
El concierto estuvo a cargo de Jhon Alex Castaño, El Chico Jaramillo (foto) y el local Kevin Muñoz con lleno total en el CIC Centro de Integración Ciudadana de La Plazuela.
La Feria culmina con un acto protocolario presidido por las autoridades y luego la Gran Parada de campeones donde los mejores ejemplares de trocha, galope y paso fino desfilan por la pista de resonancia. Es un momento emocionante, lleno de alegría, de folclor, himnos y canciones; de sentimiento patrio que arranca lágrimas en más de un espectador y expositor.
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