LA PATRIA | MANIZALES

Un manizaleño apodado Camila sigue haciendo de las suyas en el oriente de Caldas y en veredas entre Nariño y Puerto Venus, en el suroriente antioqueño.

Está al mando de las denominadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia en esas zonas y esta semana reapareció con panfletos que se repartieron por distintos lugares. Vecinos explicaron que los papeles intimidantes los entregaron, a plena luz del día, personas que portaban armas de fuego y sin cubrir su rostro. "Eran unos seis hombres, pero la estructura tiene 40", indicaron. A Camila lo acompaña alias Chatarra y los han visto por Morro Azul y Puente Linda.

En el reciente panfleto amenazó a las comunidades de Sonsón, Argelia, Puerto Venus, Nariño, Puente Linda y Pueblo Nuevo (Caldas). El documento indica que declara objetivo militar a todo el que esté en contra de sus políticas y a la vez ofrece seguridad en la zona para erradicar a los "sapos, ladrones, cuatreros y jíbaros".

Tiene hasta el descaro de decir que quienes provoquen riñas deben pagar una multa de $500 mil, además de servicio social embelleciendo parques y rozando vías. Al final de la hoja hay un listado de personas.

Zozobra

El oriente caldense vive en zozobra por cuenta del rearme de organizaciones al margen de la ley, algunas integradas por exparamilitares desmovilizados en el 2006, que pasan la frontera entre Caldas y Antioquia, como Pedro por su casa.

A esta redacción llegaron nuevas quejas de esa zona del departamento. Primero, en Pueblo Nuevo (Pensilvania) se ha visto a unos sujetos ir de casa en casa, negocio por negocio, pidiendo el aporte "para brindar seguridad". Los habitantes prefieren no profundizar en eso, por temor.

De otro lado, en la vereda Cristales, de Samaná, se ve a integrantes del llamado Clan de Oriente, banda de desmovilizados que aterra en esa zona y cruza sin Dios, ni ley. Uno de ellos es alias Dúber, quien hace parte del grupo de Camila. Este último, quien perteneció a las Farc, en alguna investigación aportó con las autoridades sirviendo de agente encubierto para desmantelar a los presuntos componentes del Eln que delinquían en el Páramo de Letras. Ahora, usando esa doble fachada, atemoriza en el suroriente de Antioquia. Incluso, lo señalan de asesinar a un líder social en Sonsón.

A propósito de Camila, habría participado en el asesinato, en días pasados, de Tiberio Cardona, de 66 años, campesino del sector de El Faro, de Nariño. Lo ultimaron en su casa delante de su esposa, a plena luz del día. Le propinaron tres balazos.

Se cree que desde Nariño se controla todo el microtráfico, no solo de ese municipio, sino de Argelia, Sonsón y poblaciones caldenses aledañas. Camila anda con el Ñato, Chatarra y Rigo (exsoldado profesional), conocedor del territorio. A este último, segundo de Camila, lo detuvieron en esa población antioqueña en septiembre.

Capturas

El comando de la Octava Brigada indicó sobre los hechos comentados que en la región no existe presencia de bandas criminales y que se mantienen tareas de control en ejes viajes y puntos estratégicos para mantener el orden público.

Recientemente, en el oriente, detuvieron a miembros de dos bandas, que ahora responden ante la justicia por sus acciones.

El panfleto.