El "arresto" y posterior "liberación" de la líder opositora venezolana María Corina Machado provocaron ayer la repulsa de algunos líderes políticos de la región, al tiempo en numerosas capitales del continente se llevaban a cabo manifestaciones en apoyo a Edmundo González Urrutia, reconocido por la oposición y varios Gobiernos como el legítimo ganador de las elecciones presidenciales de Venezuela el pasado 28 de julio.
Las protestas han intensificado el rechazo internacional al Gobierno de Nicolás Maduro, cuya decisión de encabezar un tercer mandato ha sido cuestionada por gran parte de los países de la región y diversos organismos internacionales que no reconocen los resultados del Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el chavismo, que otorgaron la victoria al actual mandatario.
González Urrutia agradeció el apoyo internacional desde Santo Domingo, destacando que "el 85% de las actas" verifican su victoria electoral.
Desde Boric hasta Trump
Las críticas hacia Maduro se han multiplicado en la víspera de la toma de posesión de la Presidencia de Venezuela, desde el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien reclamó que los opositores venezolanos María Corina Machado y González Urrutia "deben seguir seguros y vivos", hasta el mandatario chileno, Gabriel Boric, quien manifestó que el Gobierno de Nicolás Maduro es una dictadura".
"La activista venezolana por la democracia, María Corina Machado, y el presidente electo (Edmundo) González están expresando pacíficamente las voces y la voluntad del pueblo venezolano con cientos de miles de personas protestando contra el régimen", dijo Trump en un mensaje en su red social, Truth Social.
Desde el otro extremo geográfico y político, el presidente chileno coincidió con Trump en que "en Venezuela hoy día no hay libertad".
"Y tengo que decirlo de manera muy clara, muy explícita, que no quepa ninguna duda. Por eso, como Gobierno chileno, hemos retirado nuestra representación diplomática en Venezuela", apostilló Boric.
La Administración de Joe Biden destacó la importancia de garantizar los derechos políticos y humanos en Venezuela, mientras que activistas en ciudades como Nueva York se unieron en protestas portando banderas venezolanas y pancartas que rezaban "Maduro te vas".
En Bogotá y otras ciudades colombianas, centenares de venezolanos marcharon con el lema "El 10 es hoy. Hasta el final", respaldando a la oposición.
El Gobierno argentino, liderado por Javier Milei, describió la detención de Machado como un "ataque criminal" y una "demostración de fuerza" del régimen de Maduro.
En tanto, el presidente panameño, José Raúl Mulino, exigió la "plena libertad" de Machado y responsabilizó al "régimen dictatorial" por su integridad física.
En una protesta en la capital, los manifestantes proclamaron: "No podemos aceptar que Maduro mantenga el poder después de haber perdido las elecciones".
En la capital de Perú, país donde viven 1,5 millones de venezolanos, cientos de inmigrantes de ese país se congregaron de manera espontánea frente a la Embajada de su país coreando "¡Venezuela, libertad!", anticipándose a la protesta convocada para hoy.
En Quito, centenares de venezolanos manifestaron con "ilusión y esperanza" en un acto en el Parque Bicentenario.
Una jornada confusa
La líder opositora de Venezuela María Corina Machado, tras 133 días de clandestinidad, reapareció ayer para participar en la protesta que convocó para defender el reclamado triunfo electoral del antichavista Edmundo González Urrutia, en la víspera de la toma de posesión presidencial, y que tuvo como desenlace su "retención" -como calificó el hecho su equipo-, marcada por incógnitas.
Tras el "anhelado" reencuentro, como lo definió Machado la noche anterior, la exdiputada fue "violentamente interceptada", según el antichavismo, que denunció disparos por parte de "efectivos del régimen" contra el grupo de motoristas que la trasladaban.
Desde entonces y por un lapso aproximado de hora y media, los simpatizantes de la oposición mayoritaria dentro y fuera de Venezuela vivieron un tenso episodio al desconocer, durante ese tiempo, dónde y cómo se encontraba Machado, a quien Human Rights Watch (HRW) dio por detenida.
En medio de la incertidumbre, medios oficialistas y autoridades venezolanas, como la vicepresidenta Delcy Rodríguez, difundieron un cuestionado video, que todavía no ha sido verificado, en el que Machado decía estar "bien" y "a salvo".
Posteriormente, el equipo Con Venezuela, que forma parte de la mayor coalición opositora -la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)-, aclaró que ese y "varios videos" fueron grabados de manera "forzada" durante "el período de su secuestro" y que, posteriormente, "fue liberada".