A finales del año pasado el presidente Petro estuvo en el municipio de Palestina, donde fue ampliamente ovacionado y donde manifestó el apoyo del Gobierno nacional para la continuación de la construcción de Aeropalestina. Garantizando con este anuncio los recursos requeridos para la primera fase que consiste en una pista de 1.460 metros y que tiene un valor aproximado a los $830 mil millones.
De acuerdo con el cronograma presentado, en el primer trimestre de este año se seleccionarán las firmas que podrán participar, la constructora que se encargará de la obra deberá estar definida para finales de julio y el contrato firmado en septiembre. Cronograma bastante ajustado. Además, se tienen contemplados diez meses de preconstrucción, para la revisión de los diseños y de la metodología de la construcción, con lo que se espera se mitiguen posibles contratiempos durante la ejecución de los trabajos.
El proyecto deberá iniciar su construcción en el mes de julio del año entrante y el plazo de la obra, que consiste en el movimiento de tierra y la construcción de la pista, es de dos años, por lo que debe estar terminada en el mes de julio de 2028.
Los recursos para la construcción de la obra provienen, el 15% de la región, que tiene conformada la Asociación Aeropuerto del Café, de la que es gerente Fernando Merchan y su oficio es acompañar la construcción del proyecto. El 85% restante de la plata la pone la Nación. Los recursos están depositados en una fiducia y son los que se denominan el patrimonio autónomo.
El contrato de construcción lo firma la Aerocivil. El manejo de los recursos depende de un comité fiduciario, conformado en su mayoría por funcionarios del orden nacional y es presidido por Laura Saravia. Este comité es el encargado de nombrar al gerente del proyecto.
Hasta el momento el cronograma no se está cumpliendo, entre otras cosas porque no hay gerente del proyecto. Para su nombramiento se tiene programada la primera reunión del comité fiduciario para finales de este mes. Sin embargo, con los cambios en el gabinete ministerial, falta ver si se realizará y si Laura Saravia, como canciller, continuará con la presidencia. Así las cosas, hasta el momento el cronograma lleva como mínimo un mes de atraso.
Va a ser muy poco probable que para julio se tenga seleccionada la firma constructora, lo que implicará que el inicio de los trabajos se tendrán después de que Petro haya dejado el cargo. Considero que el proyecto debe reiniciar su construcción en este Gobierno, de no lograrse se corre el riesgo de que el nuevo Gobierno no esté dispuesto a respetar el contrato o quiera darse un compás de espera para estudiar el proyecto y dar su concepto -ojalá favorable- para el reinicio de las obras.
Hay que tener en cuenta que el plazo establecido para el movimiento de tierra es muy optimista. Mover los más de 6.5 millones de metros cúbicos no es fácil. El volumen es muy alto. Además de maquinaria, equipos, mantenimiento de las vías para que las volquetas transiten sin problemas, se requiere la ayuda del clima. Tierra húmeda no permite el funcionamiento de la maquinaria y nuestra región propiamente no se caracteriza por tener pocas lluvias.
P.D. Sigo siendo un total convencido de la importancia del aeropuerto. La región no debe desfallecer en este empeño.