Otro Día sin Carro y sin Moto en Manizales, hoy durante 13 horas, de 6:30 a.m. a 7:30 p.m. Y aunque es voluntario, reiteramos que hacerlo un día al año se convierte en una conmemoración con muy poco sentido y trascendencia, aparte de que las administraciones públicas cumplan con lo establecido en decretos. Unos 22 años después del primer Día sin Carro en esta capital las conversaciones deberían ser alrededor de otras obligaciones ciudadanas si la intención de fondo es mejorar la calidad del aire que respiramos.
Es un logro fugaz dejar un vehículo guardado por unas horas, sin que sea parte de políticas y programas educativos y pedagógicos en los que todos comprendamos de fondo que la apuesta colectiva debe ser reducir emisiones de CO2 en el ambiente. El peligroso dióxido de carbono es el que en altas concentraciones se convierte en responsable del calentamiento global, y esto también tiene que incluir al transporte público que funciona con diésel y es el que en Manizales genera entre el 55% y el 60% del material particulado (hollín), según estadísticas de Corpocaldas.
En un territorio relativamente pequeño como este y que nos permite con cierta facilidad hacer muchos recorridos a pie o en bicicleta, sobre lo que deberíamos estar discutiendo es cómo hacemos para que las cifras crecientes del uso del transporte privado (carros y motos) como medio más usado para movilizarse en la ciudad se vayan revirtiendo. Lo advirtió esta semana el director de Manizales Cómo Vamos, Camilo Vallejo, en el foro de Seguridad vial y movilidad sostenible, porque estamos muy cerca de que la proporción de motocicletas circulando supere a la de carros, y viene bajando la proporción del uso del transporte público.
Si todos hiciéramos esfuerzos por cambiar hábitos y costumbres en movilidad se empezarían a tener favorables resultados, como la reducción de las tasas de accidentalidad en las que los motociclistas siguen siendo los principales protagonistas y afectados en siniestros viales. Santiago Avalo, gerente de negocios de Honda, aseguró que en Colombia hay 11 millones de motos y que en el 2023 perdieron la vida 8.300 personas que se movilizaban en ellas, por lo que invitó a mejorar las habilidades de conducción y a respetar las normas de tránsito, pero también a no ver la moto como enemiga en la vía porque es un medio de transporte concentrado en los estratos 1, 2 y 3. La cuestión son las formas de conducir y es lo que hay que modificar.
Cualquier programa de movilidad debe contener el enfoque del cuidado ambiental, por eso hay que llamar a los empresarios del sector transporte a que se vinculen, empiecen a hacer lo propio en sus flotas. Podrían ir migrando al uso paulatino de vehículos más amigables con el medio ambiente, aplicar medidas como la chatarrización para esos carros chimenea que tanto se ven y molestan en la ciudad. La suma de esfuerzos ciudadanos, del sector público y del sector privado asegurará con certeza una mejora en la calidad del aire, hasta llegar al momento en que no sea necesario celebrar un día sin carro y sin moto, porque todos los días se están aplicando medidas para ser menos contaminantes.