Capitán Guillermo Stevens Salgado Rendón, excomandante de la Estación La Dorada;

Capitán Guillermo Stevens Salgado Rendón, excomandante de la Estación La Dorada. Fue condecorado como el mejor policía del departamento.

 

Arrancó a las 9:00 de la mañana de este viernes 20 de septiembre la formulación de acusación contra 8 uniformados de la Policía Caldas, señalados de ser colaboradores de la banda La Empresa, brazo armado del Clan el Golfo, en el oriente caldense, especialmente en La Dorada. LA PATRIA está en ella.

La fiscal especializada empezó diciendo que se reconocerá como víctima a Juan Carlos Perdomo Robledo, de 43 años, a quien lo señalaron falsamente de matar a Brandon Camilo Ortiz López, alias Zapatico (foto), el 21 de julio del 2019, en el puerto caldense. Esa vez resultaron lesionadas Yina Vanesa Benitez Quiñonez y Laura Katerine Parada Moreno.

La Policía lo aprehendió, al parecer, para cubrir a La Empresa, verdadera responsable de ese crimen.

Posteriormente, el ente acusador identificó a cada uno de los uniformados detenidos: capitán Guillermo Stevens Salgado Rendón, excomandante de la Estación La Dorada; teniente Santos Steven Pirabán Martínez; subintendente Andrés Mauricio Rodríguez Arias; subintendente Jaime Erleinson Suache Osorio; patrulleros Jénnifer Lucía Arenas Salazar, Fabián Alberto Ospina Capera, John Harold Salazar Salas y Nicolás Jiménez Cano.

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El proceso no quiere decir que sean culpables, será un juez quien determine si son o no responsables.

 

La investigación

"La investigación data del 2021, cuando se supo que en La Dorada se ejecutaba una actividad ilícita de tráfico de estupefacientes. Sin embargo, históricamente ha existido por su posición geográfica, lo que usa por personas para desplegar actividades criminales. En otra fiscalía reposaba un proceso penal, que traía a colación una noticia criminal que nos permite empezar con la actual investigación", dijo la fiscal.

Se hizo referencia al homicidio de Zapatico y de la existencia de La Empresa, organización que para el 2021, incluso desde atrás, era liderada por Carlos Adolfo Ferro Orejuela o Titi. Se dedicaba a la venta de vicio, adquirido en Antioquia, Tolima, Cauca y Cundinamarca, y aprovechaba la cercanía con Caldas.

"Tendría el dominio y control territorial para el tráfico. Los alcaloides eran transportados en motos, carro y servicio público, usando a personas de bajos recursos. La Empresa ejecutaba homicidios por la lucha de territorios, había extorsión, entre otros. Las personas tenían roles específicos. El grupo contaba con la colaboración de policías e integrantes de la Sijín de La Dorada para evitar operativos y capturas".

En esta investigación se supo que Titi mencionó a los hoy indiciados como colaboradores. "La Empresa estaría siendo patrocinada por un oficial de la Policía, el capitán Salgado, funcionario con el que hizo un pacto para remuneración económico, bajar las cifras de homicidio y aumentar las capturas. Había que dejar libres a los integrantes de La Empresa. Si un aprehendido era de esta, quedaba libre. Si no, lo detenían. Contaba con listado de placas de motos en las que se movían los de La Empresa, para saber que no les podían hacer nada".

Del interrogatorio a Titi se supo del convenio y que Salgado recibía $4 millones "de sueldo" quincenales para dejarlos delinquir.

Se explicó que Salgado había pedido $7 millones quincenales. Se reunían en La S, antes de llegar a La Dorada, para los acuerdos.

 

Zapatico

"Tuvieron varios encuentros para esos pactos. Surge una tercera persona que empieza a vender droga en La Dorada. Para Titi era incómodo que llegara competencia y que le quitaran los clientes. Esa persona era Zapatico. Titi le reclamó a Salgado y pidió sacarlo del camino. Ahí es donde, al parecer, asesinan a Zapatico en el establecimiento Masturbar, de Las Ferias, el 21 de julio del 2019, ordenado por Salgado y en coautoría con funcionarios de la Sijín. Este crimen fue trascendental para que La Empresa pudiese seguir su actividad ilícita".

Uno de los pactos que existían era que no hubiese homicidios y si se daban, sacarlos de la zona para que no le marcaran negativamente en la estadística Salgado. El esclarecimiento de la muerte de Zapatico tuvo, según la fiscal, un tinto de legalidad, capturando a Juan Carlos Perdomo Robledo, apodado Chispi (foto), hermano de un patrullero de la Policía Caldas, en el que participaron 4 funcionarios de la Sijín, hoy procesados. Lo señalaron falsamente.

"Hasta hace 20 días ese crimen estaba resuelto, pero Chispi será absuelto el 1 de noviembre porque no hay pruebas concretas en su contra. Algunos de los uniformados acá procesados construyeron elementos que condujeron al error a funcionarios de la Rama Judicial para la captura de esta persona. Usaron artimañas para involucrarlo. Lo sustrajo el teniente Santos de su casa el 21 de julio y Jénifer y Ospina Capera lo capturaron de manera ilegal, haciéndole creer que cometía un delito por tráfico de estupefacientes, con 4,4 gramos".

"El teniente Santos les ordenó retenerlo para que en ese lapso los funcionarios de la Sijín, con un informe falso, le pidieran al fiscal detener a Chispi por la muerte de Zapatico. Chispi fue víctima de una construcción temeraria de la Policía Nacional. Todo esto tuvo su origen en la necesidad de clarificar el crimen que ellos mismos planificaron. Mágicamente lo resolvieron en dos días. Con todo esto pudimos obtener las 8 órdenes de captura contra los acá encartados. Pediremos medidas de aseguramiento para ellos".

Hay una entrevista de una mujer, cuando se judicializó a Chispi, pero ello indicó que jamás lo señaló, que nunca dijo lo que los policías informaron.

Por eso, les explican qué delitos les atribuyen a cada uno. Se unen la Policía de vigilancia con la Sijín para engañar a la comunidad y al aparato judicial, expresó la fiscal.

Al capitán le imputan concierto para delinquir agravado, cohecho propio, homicidio agravado. El comandante de otro municipio, Anserma, contó cómo Salgado recibía dinero para dejar delinquir en esa población. "Hay interceptaciones telefónicas donde los dos interlocutores lo mencionan a usted como responsable de algunos homicidios en La Dorada", le manifestó el ente acusador en la imputación, sobre las 10:15 de la mañana.

Lo narrado por la fiscal hace parte de una investigación, es solo una imputación y el capitán tiene la posibilidad de defenderse en este proceso.

Hubo regaño para los uniformados porque hoy, al igual que ayer, se pasan papelitos entre ellos. La juez ya había advertido esta mañana que eso no se permitía.

10:30 a.m. Ahora sigue la imputación contra el teniente Santos Steven Pirabán Martínez, quien habría ordenado la retención de Chispi por tres días, mientras buscaban la orden de aprehensión por homicidio. "Usted les suministró a Jénnifer Lucía Arenas Salazar (foto) y Fabián Alberto Ospina Capera los 4,4 gramos de droga para poderlo detener. Hasta les prometió días de permiso".

 

11.20 a.m. Termina la imputación contra los 8 uniformados. Se da un receso.


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