Foto | Archivo | LAPATRIA
El punto en que coinciden todos los líderes es la importancia de eliminar el peaje de Pavas y adelantar varias obras. Las distancias se mantienen en si se deben eliminar otros dos peajes como San Bernando del Viento y Santágueda.
LA PATRIA | MANIZALES
Eliminar un solo peaje, el de Pavas, o tres. Esta caseta, más las de San Bernardo del Viento y Santágueda.
Estas propuestas son las que mantienen dividido al departamento frente a la operación de la futura concesión que manejará el corredor vial de 256 kilómetros de longitud entre Caldas, Risaralda y Quindío, en reemplazo de Autopistas del Café.
Aunque la Gobernación de Caldas, la Alcaldía de Manizales y el Comité Intergremial de Caldas ya presentaron oficialmente una propuesta, en el concepto de algunos ingenieros, líderes cívicos y dirigentes políticos, las autoridades municipal y departamental se quedaron cortos en su pretensión.
Eso porque en su documento publicado el pasado lunes pidieron eliminar solo la caseta de Pavas que está a solo unos 13 kilómetros de Tarapacá I y ajustar las tarifas de Tarapacá I y II, recogiendo un porcentaje del anterior Pavas. Frente a San Bernardo del Viento y Santágueda, solicitaron unas tarifas diferenciales, como un beneficio a los residentes locales y sectores productivos y cumplir con varias obras que pide la región.
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El punto de tensión
Aunque los críticos de la propuesta en general coincidieron en que las obras que pidieron son las que se deben hacer, con respecto a los peajes insisten en que no puede ser solo uno sino tres. Las razones se fundamentan en que Caldas no puede seguir conviviendo con 5 de las 7 casetas que hay en el Eje Cafetero, y que representan el 46% del recaudo de todo el Eje.
El planteamiento es que los corredores viales entre las tres regiones son similares en longitud y deberían recaudar lo mismo. Sin embargo, hoy se perciben unos $65 mil millones en la caseta entre el Valle del Cauca y Armenia (Corozal) y cerca de $60 mil millones en el punto entre Armenia y Pereira (Circasia), contra unos $112 millones recogidos entre Pereira y Manizales, en las 5 casetas que hay en Caldas, restándole competitividad a esta última región.
El malestar entre los dirigentes Caldas
El debate se presenta desde hace dos años ya que el contrato de la concesión Autopistas del Café vencerá en el 2027, por lo que ya existe otra opción del Grupo Odinsa, accionista mayoritario del actual contrato, para seguir operando estas vías por 30 años más, a través de la nueva concesión que propuso: IP Conexión Centro. Su propuesta la hace al tener prioridad por la actual administración que ha tenido por 30 años construyendo y administrando estas vías, desde 1997.
Aunque en términos generales, la mayoría de consultados está de acuerdo con que el modelo de concesiones es la mejor opción para abordar los desafíos de conectividad del país, también coinciden en que esas condiciones deben cambiar, ya que el compromiso de obras es diferente y que las concesiones ya cerraron un ciclo que hoy se tiene que cambiar.
Unido a ello, dirigentes como la presidenta de la Sociedad Caldense de ingenieros Civiles (SCIC), Claudia Pilar Calderón Acuña, cuestionaron el cambio de dirección que tomó el gobernador de Caldas, al insistir que por mucho tiempo, desde que era candidato, los acompañó en que se debían eliminar los tres peajes y dejar solamente el interdepartamental.
Una primera aproximación
Sin embargo, contrario a este malestar, el exsecretario de Infraestructura de Caldas y actual diputado por el Partido Nuevo Liberalismo, Luis Alberto Giraldo, sostuvo que es un logro que ya hayan escrito y firmado un comunicado oficial para que por lo menos se retire ese peaje de Pavas, además de las obras que se deben hacer. No obstante, insistió en que el pedido se seguirá centrando en que retiren los tres, en lo que denominó como el triángulo de la discordia, pues en su concepto lo que se busca es que los municipios de Caldas, por lo menos los del área metropolitana, no tengan esa talanquera.
Sostuvo que no es posible ponerle tarifas diferenciales a todo el departamento, aunque sí pidió unas tarifas especiales para quienes habitan y tienen vehículo en la vereda San Andrés en Chinchiná, ya que quedaron aisladas por el peaje de Tarapacá.
En las peticiones también se ha planteado que con el dinero que se recoja en cada zona se hagan las inversiones que se requieren y se exigen en esas áreas de influencia de los peajes, caso el mejoramiento de la vía La Paila - Calarcá.
"Lo que no puede ser es que se recauden recursos en un corredor para invertir en otra parte, afectando además el desarrollo de Caldas", consideró Giraldo, aunque en este punto también hay división.
La expectativa es que el próximo mes se realice una nueva socialización sobre el avance de las propuestas, pese a lo cual la advertencia en Caldas es que seguirán dando el debate de lo que califican justo y equitativo para esta región.
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Opinan los líderes regionales
Claudia Pilar Calderón, presidenta de la SCIC
"Caldas no puede seguir secuestrada por peajes, a costa del beneficio de los intereses de unos particulares que se lucran con los recursos locales y restan competitividad. Este es el único departamento donde se deben pagar peajes para ir a los centros recreacionales de las cajas de compensación (Confa). Debe existir igualdad y equidad, y si queremos mejorar el desarrollo cultural, turístico, económico y social de Caldas y del área metropolitana, debemos propender por que se eliminen los 3".
Santiago Osorio, representante a la Cámara de la Alianza Verde
La propuesta que recién presentaron no soluciona los problemas de fondo pues estos tres peajes limitan la economía, el turismo y el desarrollo. Por ello mantenemos firmes para seguir las mesas de trabajo con el Gobierno nacional para que se eliminen tres peajes, no uno. Por ello iniciamos una conversación con la Superintendencia de Puertos y Transporte, con la ANI y con la misma comunidad, y se le entregó al Viceministerio de Transporte 26 mil firmas recogidas en las calles.
Luis Alberto Giraldo, diputado de Caldas por el Nuevo Liberalismo
"Al quitar el peaje de San Bernardo, le quitaríamos uno de los dos peajes que pagan los que vienen del occidente y uno de los tres que cancelan los del norte cuando vienen por Pacífico 3. La conveniencia económica y el desarrollo de la región y del mismo Manizales, el impulso turístico, el potencial de vivienda para el sector del Rosario, del kilómetro 41, y el fortalecimiento agroindustrial y logístico será mayor si quitamos esas tres casetas".
Camila Palacio Arce, directora del Comité Intergremial de Caldas
Desde el Comité Intergremial siempre hemos sido conscientes de la necesidad de contar con un recaudo de peajes para sacar adelante las obras de la región, no se pueden levantar todos. Sin embargo, sí insistimos en la necesidad de que se retire el de Pavas, este es innegociable. También hemos sido enfáticos en que hayan tarifas diferenciales en San Bernardo del Viento y Santágueda, siempre y cuando se hagan las obras que pide la comunidad, pero si no las hacen, también se podrían levantar.
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