La alcaldía de Dosquebradas empezó a modificar la cara del popular sector de El Crucero del municipio industrial. La zona históricamente ha estado dominada por el comercio en el día, y por las casas de lenocinio en las noches. Desde la calle 44 hasta la calle 46 con Avenida Simón Bolívar, el sector es concurrido desde primeras horas de la mañana hasta muy entrada la noche. 

A pesar de su ubicación estratégica y comercial, no es un lugar con la mejor reputación en el municipio. Debido a la poca funcionalidad del lugar para personas con movilidad reducida y por la imagen que tiene. 

Uno de los cambios que promovió la administración de Roberto Jiménez fue el desmonte del puente, que llevaba años siendo usado como baño público por personas en condición de calle, según los funcionarios, y como centro de consumo de sustancias. 

LA PATRIA consultó a la administración para conocer cuáles serán las otras obras que cambiarán la imagen del municipio industrial, y ante la negativa de la Empresa Edos, encargada de los trabajos diseñados para El Crucero, Yeison Palacio, secretario de movilidad y tránsito, atendió al medio, ya que ha estado al tanto tanto de la planeación como de la ejecución de las primeras obras. 

Primer paso: desmonte del puente de El Crucero

Según el secretario, los peatones dejaron de usar el puente debido a problemas como robos, consumo de sustancias psicoactivas y actos vandálicos. Además, las bases del puente fueron utilizadas como baños públicos, lo que agravó la percepción de abandono en la zona.

“El alcalde Roberto Jiménez asumió desde el inicio de su administración la recuperación de El Crucero. Iniciamos retirando las mallas y demoliendo los barandales en concreto. Durante el fin de semana comenzamos el izaje del puente, pero tuvimos retrasos debido a complicaciones con las grúas”, explicó Palacio.

Después de los inconvenientes que tuvieron con el desmonte del puente y de la remoción de los escombros, que duró un par de días, seguirán otras obras. 

Soterrado, pompeyanos y semáforos inteligentes

Otro de los puntos críticos de la zona es la acumulación de basuras, especialmente en el área de Puente Garzas, ubicado en la calle 46. Para resolver este problema, se instalará un soterrado similar al de Ciudad Victoria en Pereira, con un costo aproximado de $250 millones. 

Este sistema no solo mejorará la estética del lugar, sino que facilitará la disposición adecuada de residuos y permitirá la aplicación de comparendos ambientales mediante cámaras de vigilancia.

En cuanto a la movilidad, Palacio informó que la obra contempla la instalación de semáforos inteligentes en 25 intersecciones del municipio. 

Estos dispositivos modulan el tráfico en tiempo real, priorizando las avenidas con mayor flujo vehicular en cada momento. “No se trata de fotomultas, sino de una herramienta para agilizar el tráfico y evitar congestiones”, aseguró el secretario.

No está claro el valor total de las obras

Aunque el costo del soterrado ya está definido, otros elementos de la obra, como los pompeyanos (cruces peatonales elevados), aún no tienen un presupuesto final debido a los ajustes y contratiempos que surgieron durante el desarrollo del proyecto.

“El soterrado costará aproximadamente $250 millones, pero los pompeyanos, por sus mayores dimensiones y complejidad, serán más costosos que los instalados en otros sectores”, explicó Palacio, quien prefirió no comprometerse con cifras exactas hasta que se finalicen los cálculos.

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