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Los cuerpos de las víctimas mortales de la tormenta Elliot fueron hallados en vehículos, en casas y en la calle.
EFE | LA PATRIA | NUEVA YORK
200 millones de estadounidenses, alrededor del 60% de la población, se ha enfrentado a algún tipo de aviso o advertencia relacionado con la tormenta Elliot, calificada como "única en una generación" por el servicio meteorológico nacional (NWS, en inglés), que ha causado gélidas temperaturas desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta el río Grande (también llamado río Bravo), en la frontera con México.
Las fuertes nevadas y los vientos huracanados se han llevado la vida de 50 personas, la mitad en la zona de Búfalo, en el estado de Nueva York, miles de personas atrapadas en sus casas y en las carreteras, miles de pasajeros varados en Nochebuena por la cancelación de vuelos y miles de hogares sin luz por el colapso de la infraestructura eléctrica.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que su "corazón está con aquellos que perdieron a sus seres queridos este fin de semana festivo".
Elliot provocó miles de retrasos aéreos y la cancelación del 20% de los vuelos en la víspera de Nochebuena y Navidad, cuando miles de personas intentaban reencontrarse con sus familias.
Ayer 5.300 vuelos fueron cancelados, según el registro del portal Flight Aware.
También llegó a dejar 1,7 millones de hogares y negocios sin luz por el impacto de las ventiscas en el sistema eléctrico y la alta demanda de calefacción.
Todavía ayer por la tarde, unos 90.000 usuarios seguían a oscuras, principalmente en los estados de Washington, Nueva York y Maine, según el rastreo de Power Outage.
Precisamente en el estado de Washington, en el extremo noroccidental del país, donde se acerca otro frente frío, las autoridades investigan el sabotaje por parte de sujetos desconocidos de cuatro subestaciones eléctricas que dejó sin luz a miles de personas el día de Navidad.
Estas festividades fueron las más frías de los últimos 40 años en la mitad este del país, incluido Florida, conocido como "el estado del sol".
La ciudad de Nueva York vivió el día de Navidad una temperatura mínima de 10,5 °C bajo cero, algo no visto desde 1872. Washington, la capital estadounidense, estuvo a 10 °C bajo cero, la Navidad más fría desde 1983, y los termómetros en Tampa, en Florida, bajaron de los cero grados, algo que no ocurría desde 1966.
Según el recuento de la prensa local, 50 personas han fallecido durante los últimos días por los estragos de la tormenta, cerca de la mitad en el noreste del estado de Nueva York, donde se encuentra Búfalo.
El número de muertos en ese estado asciende a 27, 18 de ellos en Búfalo, aunque las autoridades prevén encontrar más muertos en las próximas horas.