Señor director:

El día domingo 17 de noviembre del año en curso, fue publicado en "El periódico de casa", en primera página, un titular que enuncia "transporte público carga con 2 muertos y 162 heridos". A renglón seguido, menciona: "Entre Socobuses y Gran Caldas suman, del 2020 al 2024, dos muertos y 162 lesionados en accidentes de tránsito en Manizales (97 y 65 respectivamente)".

Es de asumir, que el periodista realizó una labor investigativa para obtener dichas cifras. El asunto es que en cualquier investigación, seria y rigurosa, las cifras no tienen utilidad si estas no son interpretadas. Cualquier investigador sabe que para convertir una cifra en dato y exponerlo como una afirmación, esta debe ser interpretada.

En dicho artículo, se obvió esta regla básica, convirtiendo lo que se pretendía informar en un error de apreciación.

1. Para analizar la accidentalidad en la ciudad, se debió tener en cuenta todas las estadísticas de las empresas existentes, creando un porcentaje de participación de cada una de ellas en los eventos.

En la estadística presentada por ustedes, omiten accidentes mortales en donde están involucradas otras empresas, por ejemplo: El 30 de septiembre del 2023, el periódico La Patria registra “Pasajera muere al caer de buseta en movimiento cerca del Batallón”. En este accidente, no están involucradas las dos empresas que mencionan en el artículo, tampoco tienen en cuenta el accidente mortal que ustedes registran el 16 de Abril del 2024, “Mujer de 61 años se cayó de una buseta en movimiento en Fátima”.

2. Hay empresas de transporte público colectivo en la ciudad que tienen 45 carros, y empresas, como mi representada, que tienen 376. La cantidad de vehículos define la cantidad de rutas servidas y por ende, de viajes. En el ejemplo anterior, una empresa de 45 carros, hará en promedio unos 216 viajes al día como máximo, a comparación de Socobuses, que hace 3.400 viajes por día. Es de saber que no tiene la misma incidencia un accidente en la empresa pequeña, que un accidente en la empresa grande.

3. No se tuvo en cuenta, ni la cantidad de vehículos, ni los viajes por día de estos, ni se evaluó la proporción viajes/accidentes por empresa. En Manizales hay 5 empresas de transporte urbano colectivo, que al parecer no existen para el periodista.

4. Los accidentes tienen gravedad diferente, desde leves, moderados y severos, siendo los leves y moderados el 92%. En el artículo, nuevamente omiten este asunto.

5. La cifra que se menciona de lesionados, NO discrimina entre la culpabilidad nuestra y de un tercero. Como se consigna en el artículo, queda la sensación de que todos los accidentes fueron por culpa de mi representada. En nuestra estadística casi el 60% de los accidentes obedecen a terceros.

Con lo mencionado, se puede concluir que el artículo está lleno de errores. Me pregunto si estos obedecen a la ligereza y desconocimiento de quien hizo la “investigación”, o por el contrario, si existen otras motivaciones no tan evidentes.

El problema de este tipo de artículos e incidentes, es que afecta nuestro buen nombre e integridad. Para el periodista, no debe de convertirse en un hábito cumplir con la entrega de un artículo así sea su contenido superficial y carente de rigor, pues esto a lo que lleva es la pérdida de credibilidad y calidad del contenido. Creo, que el consejo editorial debería revisar juiciosamente lo que se afirma y publica para evitar a futuro la desinformación.

Los invito a que nos visiten y conozcan nuestro Departamento de Accidentalidad y Estadística. Así se podrán empapar del trabajo arduo de prevención que se hace día a día y puedan conocer verdaderamente los datos para realizar una investigación apropiada.

Como dice el secretario de Tránsito en la entrevista que ustedes mismos publican, todas las empresas tenemos Planes Estratégicos de Seguridad Vial. En Socobuses, por ejemplo, hacemos revisiones técnico-mecánicas cada 2 meses (la ley obliga c/6 meses para este tipo de servicio). Es de recomendar que observen como cada empresa maneja esto y lo tengan muy presente para hacer este tipo de publicaciones.

Con esta carta busco expresar mi total desacuerdo y rechazo con el manejo que se le dio a esta difusión, hay una falta de rigor en la información, pues esta afecta la imagen que tenemos ante los usuarios. El artículo predispone al lector a condenar a mi representada como una generadora de accidentalidad.

Día a día luchamos por hacer mejor nuestra labor de manera responsable y ética.

Claudia Cristina Gómez Londoño, gerente (E).

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