El caracol africano hace presencia, por estos días, en algunas veredas de Arauca (Palestina). Técnicos ambientales y otros funcionarios de la Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC), en unas visitas de inspección y vigilancia a La Bastilla y El Retiro recolectaron cinco kilos de este molusco.

La abogada Milena Zamorano, contratista de la Secretaría de Medio Ambiente de Caldas, indicó que “este es sumamente peligroso, porque es vector de un parásito que afecta a animales de granja, a los domésticos, a la fauna silvestre y a los humanos, con enfermedades graves como la meningitis (inflamación de las capas que recubren el cerebro)”.

Precedente

No es la primera vez que en el corregimiento prenden alarmas por la presencia del caracol africano, especie que se reproduce -con facilidad- en lugares con alta cantidad de residuos orgánicos, como puntos de basura, escombros y heces húmedas.

Las autoridades ambientales quieren evitar que se multiplique. Por eso dictan, en los lugares que visitan, unas charlas sobre su manejo y disposición final. Sugieren, en caso que toque, manipularlo con guantes y rociarle abundante sal para que muera. Aconsejan no arrojarlo a las fuentes hídricas y enterrarlo en un hueco con cal.

Tenga en cuenta

Belalcázar, Anserma y Risaralda también reportaron la presencia del caracol africano. Allí también trabajan las autoridades.

Foto / Cortesía / LA PATRIA

En Arauca (Palestina) realizan controles de erradicación del caracol africano, especie invasora que destruye cultivos. Es tóxico, por lo que no se debe manipular directamente.

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