En Anserma la historia de Carmen Rosa García Marín, conocida popularmente en este municipio como "Rosita La Santa", sigue dando de que hablar.

Esta mujer falleció en 1972 y dedicó buena parte de su vida a la oración. Quienes la conocieron le reconocen que era piadosa, tanto que después de fallecida no han faltado personas que se volvieron sus devotas y le atribuyen milagros.

El pasado 27 de diciembre cundió la especulación cuando no se encontraron los restos óseos de esta "santa". Ese día se pretendió realizar la exhumación en una tumba en tierra, lugar donde acudieron por más de dos décadas los devotos de la ansermeña para rezarle y pedirle favores.

Se atribuyó el no hallazgo a la humedad del terreno en el que supuestamente se encontraban los restos óseos.

A raíz de la publicación del no hallazgo de los restos óseos en el lugar que todos creían que estaban, donde siempre hubo una foto de Carmen Rosa y una ilápida, familiares del conductor Ramón Loaiza, cuyos restos  permanecen en el mausoleo de los motoristas en el cementerio San José, contactaron al sacerdote Jorge Iván Restrepo Santacoloma del templo de Santa Bárbara.

Le aseguraron que los restos de Rosita la Santa siempre permanecieron en el mausoleo de los Motoristas, compartiendo un mismo osario con los del conductor Ramón Loaiza.

Nueva exhumación de Rosita La Santa

Ante la información, se programó una nueva exhumación con presencia de parientes de Rosita, de familiares del conductor Ramón Loaiza y de medios locales de comunicación.

Efectivamente se hallaron en el sitio indicado dos bolsas, una con los restos de Rosita y otra con los restos del conductor. Los de la "santa" ansermeña estaban al fondo del osario, según indicó la familia del conductor.

Según Isabela López Loaiza, nieta de María Ruby Taborda de Loaiza, la confusión se originó en el año 2004, cuando la familia de Ramón Loaiza exhumó sus restos.

Como el osario de propiedad de la familia ya estaba ocupado por Carmen Rosa, María Ruby Taborda autorizó compartir el espacio, con la condición de que la lápida llevara únicamente el nombre de Ramón Loaiza.

Un nuevo lugar para depositar los restos de Rosita La Santa

Los restos de "Rosita la Santa", en medio de rezos y cánticos del sacerdote Iván Restrepo, fueron trasladados a una nueva capilla construida en honor a la Virgen del Carmen por el sacerdote Uriel Palacio, párroco del templo de Santa Bárbara, de Anserma, con el apoyo de la comunidad.

Historiadores señalan que el lugar que visitaba la comunidad solo contenía una lápida, una fotografía y la imagen de un Niño Dios, pero nunca albergaron los restos de Rosita la Santa.

Ahora los restos para sus devotos están en un columbario o cenizario en la capilla construida en el cementerio San José.

En Anserma muchas personas, entre ellas el padre Restrepo, dan fe de los milagros logrados por la intercesión de esta mujer que vivió para rezar y ayudar a sus semejantes.

¿Dónde se originó la confusión por el lugar donde permanecen los restos de Rosita La Santa?

Por dos décadas en Anserma se repitió la historia de que los restos de Carmen Rosa García Marín habían sido sacados del mausoleo de los conductores por el ya fallecido profesional del volante Buenaventura Pérez.

Este contaba que cuando se sacaron los restos de ella por primera vez, se depositaron en el mausoleo, pero que ella le pidió en un sueño que los sacara de allí porque los conductores manejaban un lenguaje vulgar.

Decía el conductor que fue así como se trasladaron los restos al sitio donde muchos le oraron por años, pero resulta que nunca salieron del mausoleo.

En el osario de Ramón Loaiza se encontraron los que deben ser los restos de Rosita La Santa. Fotos | Albeiro Rudas Qhubo