Gases de efecto invernadero
Señor director:
El cambio climático es el resultado de los gases de efecto invernadero, la acción de la combustión fósil origina el aumento de las temperaturas en el planeta y aparecen las consecuencias con fenómenos nocivos, entre otros las sequías, creando otras situaciones que deterioran el medio ambiente. Temperaturas elevadas facilitan los incendios, causando la desaparición de flora y fauna, poniendo en riesgo la vida humana. Es el ser humano el autor intelectual de las quemas y fogatas que a su vez provocan incendios forestales que influenciados por la dirección de los vientos hacen daño irreversible en corto tiempo. El gas carbónico (CO2) es quizás el que más contribuye a esta catástrofe, resultado de la combustión fósil o de los hidrocarburos y en concreto de la gasolina, que en sus aplicaciones hace daño al medio ambiente, propicia las olas de calor y el aumento de temperatura. La nocividad del CO2 amerita que de inmediato se revise y suspenda la producción de petróleo y se lleve a cabo la transformación energética. Conscientes de que económicamente sostiene a muchos países, será necesario que se piense en otras formas de energía sin más aplazamientos. La lucha contra el cambio climático es inaplazable, pero necesitamos ejecuciones reales, decisiones efectivas en torno al uso de energías limpias, como la solar fotovoltáica.
En la COP16 celebrada en Cali, a la que asistieron representaciones de 196 países, los retos ecológicos que se tienen a nivel global fueron objeto de estudio y la posibilidad para emprender acciones que redunden en beneficio del planeta presenta dificultades, pues el medio ambiente se ha resentido significativamente, por la industrialización, el uso de la gasolina y el gas.Visibilizar la biodiversidad, cuidar la naturaleza serán clave en la protección del planeta para evitar la catástrofe.
Frase: “Un planeta mejor ambientalmente, es posible con decisiones sensatas”.
Rigoberto Escudero Osorio
Parquear sobre los andenes
Señor director:
Yo no sé por qué, pero actualmente a los que manejan automotores se les dio por estacionar sus aparatos sobre los andenes. Las personas que van caminando, en estos casos, tienen que lanzarse a la calle porqué no tienen más por dónde transitar. Y lo delicado del asunto es que los perjudicados le señalan este problema a la Policía o a los agentes de tránsito y no paran ni cinco de bolas porque están ocupados en otros menesteres como aplicar comparendos al por mayor. Los andenes son para los transeúntes, se ha dicho toda la vida, pero esto aquí no se llega a cumplir. El asunto más claro sobre este y otros temas es que seguimos calladitos.
Bernardo Molina Marulanda